Si he de vivir sin ti, que sea duro y cruento,
la sopa fría, los zapatos rotos, o que en la mitad de la opulencia
se alce la rama seca de la tos, ladrándome
tu nombre deformado, las vocales de espuma, y en los dedos
se me peguen las sábanas, y nada me dé paz.
No aprenderé por eso a quererte mejor,
pero desalojado de la felicidad
sabré cuánta me dabas con solamente a veces estar cerca.
Julio Cortázar, Salvo el crepúsculo
De tant en tant, Cortázar.
De tant en tant, An--na
ResponEliminaSempre, An-na(de Mca)
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